Twenty years today, on April 16, 1998, Colombian journalist Nelson Carvajal was shot and killed in Pitalito, Huila, by a hitman that escaped on a motorbike. Just prior to his death he had been uncovering corruption by the local government and businessmen. The Colombian authorities’ investigation into his murder has been plagued with irregularities and gross negligence. Twenty years after his death, his murder remains in impunity. His family has few answers and many of them have had to flee the country in their quest for truth and justice.
Carvajal’s case is not an isolated one. Indeed, in Colombia alone 152 journalists were killed between 1977 and 2015, and in 2017, Latin America and the Caribbean was the most dangerous region in the world to be a journalist.
In 2015, Robert F. Kennedy Human Rights’ litigation and advocacy team joined the Inter-American Press Association (IAPA) to represent the Carvajal family in their case against the State of Colombia before the Inter-American Court on Human Rights, in San José, Costa Rica.
Carvajal’s case is the first case of a murdered journalist to be heard by the Inter-American Court of Human Rights. We asked the Court to require States to have a higher standard of due diligence in investigating and prosecuting killings of journalists that recognize the critical role of freedom of expression and the press in every society. The Court is expected to announce its decision on the case in the coming weeks.
Nelson Carvajal’s case may be the first before the Inter-American Court of Human Rights, but the Carvajal family’s suffering over the past 20 years -- including numerous death threats that have caused more than half of them to leave the country -- is representative of the many families whose loved ones’ deaths remain in impunity. We hope that forgiveness is not all that is left for them. They deserve truth, justice, and recognition of the important role of journalists in a free and democratic society.
Today, we remember Nelson and the hundreds of other journalists who gave their lives to uncover the truth. Now it’s time for us to tell their stories.
SPANISH
Nelson Carvajal: Veinte años de impunidad y la esperanza para un entorno más seguro para periodistas en Colombia y América Latina
Veinte años hoy, el 16 de abril de 1998, el periodista colombiano Nelson Carvajal Carvajal fue asesinado a balazos en Pitalito, Huila, por un sicario que escapó en una motocicleta. Justo antes de su muerte había estado denunciando actos corrupción por parte del gobierno y empresarios locales. La investigación de las autoridades colombianas sobre su asesinato estuvo plagada de graves irregularidades y negligencia. Veinte años después de su muerte, su asesinato permanece en impunidad. Su familia tiene pocas respuestas y muchos de sus miembros han tenido que huir del país como resultado de su búsqueda de la verdad y la justicia.
El caso de Carvajal no es aislado. De hecho, tan solo en Colombia 152 periodistas fueron asesinados entre 1977 y 2015, y en 2017, América Latina y el Caribe fue considerada la región más peligrosa del mundo para ser periodista.
En 2015, el equipo de defensa y litigio de Robert F. Kennedy Human Rights se unió a la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) para representar a la familia Carvajal en su caso contra el Estado de Colombia ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en San José , Costa Rica.
El caso de Carvajal es el primer caso de un periodista asesinado en ser escuchado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Como parte de las demanda a la Corte, le solicitamos que establezca la existencia de un deber reforzado de debida diligencia en la investigación y enjuiciamiento de los responsables de asesinatos de periodista, en reconocimiento del papel fundamental de la libertad de expresión y la prensa en la sociedad. Se espera que la Corte Interamericana anuncie su decisión sobre el caso en las próximas semanas.
El caso de Nelson Carvajal puede ser el primero sobre esta problemática ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, pero el sufrimiento de la familia Carvajal en los últimos 20 años -incluidas numerosas amenazas de muerte que han causado que más de la mitad de ellos abandonen el país- es representativo de la situación de muchas familias cuyas muertes de seres queridos permanecen en la impunidad. Esperamos que el perdón no sea todo lo que les queda. Merecen la verdad, la justicia y el reconocimiento del importante papel de los periodistas en una sociedad libre y democrática.
Hoy recordamos a Nelson y a los cientos de periodistas que dieron sus vidas para descubrir la verdad. Ahora es el momento para nosotros de contar sus historias.